Hasta fin de marzo, la Empresa Nacional de Telecomunicaciones de Bolivia (Entel) tendría tiempo para solicitar la licencia de otrogamiento de espectro radioeléctrico directo que prevé la Autoridad de Transporte y Telecomunicaciones (ATT), en la banda de 3,5 GHz. La apuesta oficial involucraría obligaciones de hacer y había sido presentada hace casi un año, cuando Entel celebraba su 15° aniversario. En lo que a recursos para los privados Tigo y Viva respecta, el regulador deberá convocar a una licitación.
Sí, ATT planea entregar recursos espectrales al operador público de telecomunicaciones de Bolivia a cambio de que se concreten despliegues de infraestructura en el territorio y en torno a actividades que valora centrales, como es la educación, la salud y la minería (entre las que incluye a las zonas de explotación de litio). La noticia que trasciende por estas horas involucra que el primer beneficiado es el operador público, que accedería a operar servicios 5G; y que estaba previsto que sucediera en noviembre. Sin embargo, y hasta ahora, no se conocieron más detalles.
El plan también involucra una convocatoria para que las universidades desarrollen proyectos de investigación y desarrollo, basados en el aprovechamiento de las dotes de la quinta generación móvil.
En este marco, cabe recordar que el país también trabaja para lograr resolver su histórico problema de acceso a la salida internacional de banda ancha que, hasta ahora, se logra a través de acuerdos con proveedores de Chile, Perú, Argentina y Paraguay.
Los indicadores de Entel
Para Entel, el 2024 fue un buen año. El balance que acaba de publicar exhibe “ingresos récords” de 4.751 millones de bolivianos (687.666.823 dólares). “Nunca antes la empresa, desde su creación, obtuvo esta suma y de eso debemos sentirnos orgullosos los bolivianos. Esto demuestra que, adoptando las medidas adecuadas, se pueden obtener buenos resultados”, celebró Roy Méndez, gerente general de Entel.
De ese balance, también se desprende que el operador instaló 297 nuevas radio base, que posibilitaron garantizar la cobertura en más de 23.300 localidades en el país; y que su red de fibra óptica supera los 42.000 kilómetros (de los cuales, 5.900 fueron tendidos en 2024) y que ofrece conectividad a 574.000 hogares.
En ese balance, el operador también subrayó el aporte del Programa Nacional de Telecomunicaciones de Inclusión Social (PRONTIS), en cuya tercera fase III del proyecto de Instalación de Comunicaciones por Radio Base (IRB), se invirtieron más de 251 millones de bolivianos (36.330.114 dólares) para instalar 143 estaciones Radio Base. Le sigue la cuarta fase, que está en ejecución y en la que se invirtieron 708 millones de bolivianos (102.476.975 dólares) y que permitirán instalar 312 nuevas estaciones. Luego, vendrá la quinta fase, en la que el operador prevé destinar más 386 millones de bolivianos (55870215 dólares), para sumar otras 165 estaciones.
En febrero, el operador también anunciado la inversión superior a los 52 millones de bolivianos (7.526.557 dólares), para la inauguración de un data center edificado en una superficie superior a los 4.500 metros cuadrados, en la ciudad El Alto, que cuenta con certificación TIER III. Esta nueva infraestructura para el procesamiento de datos, cuenta con conexiones directas a los puntos de presencia que Entel posee en Lima (Perú) y San Pablo (Brasil).
La apuesta del operador se mantiene en los últimos años, concentrada en la expansión de la conectividad, sobre todo en las zonas menos favorecidas.
Daniel
Considero que la asignación de frecuencia para 5G a Entel en Bolivia debería ser más competitiva entre los 3 operadores Entel, Tigo y Viva, la asignación directa a un operador de Telecomunicaciones del Gobierno como es Entel le quita competitividad, la asignación debería ser mediante una licitación, donde el objetivo sea la de generar recurso entre los 3 operadores!!!
Noelia Tellez Tejada
Hola Daniel, gracias por tu comentario. Si, seguimos de cerca el tema para ver cómo se resolverá finalmente esa disposición de recursos espectrales para los operadores.
Saludos,
Noelia