Rewind 2024: las operadoras de España lideran la compartición de infraestructura en Europa

Sin dejar de lado las consolidaciones en los distintos países, lo que ocurre en España deberá ser tenido en cuenta para la segunda mitad de esta década

La compartición de infraestructura fue el signo que marcó el año de la conectividad en Europa. Situación que se dio en paralelo a las fusiones y adquisiciones que se registraron en esas latitudes y a una apuesta mucho más decidida por Open RAN. Telefonica, Vodafone, Orange, Telecom Italia y hasta Deutsche Telekom protagonizaron diversos movimientos que, sin dudas, están marcando un cambio de época definitivo.

La autorización de la fusión entre MasMovil y Orange en España, operación que dio lugar a MasOrange, marcó el inicio de una serie de movimientos orientados a consolidar estrategias de diversa índole. La fusión dio lugar a la operadora más grande de este país. Superó a la histórica Telefónica, hecho que obligó al resto del mercado a reconfigurarse.

España fue el escenario en donde se dieron los más fuertes movimientos de consolidaciones. Si bien en otros países europeos también se estuvieron registrando procesos en la misma dirección, el territorio español podría ser identificado como el espacio de prueba para determinar si avanzar en un proceso similar o dejar algunas cosas en otro estadío.

Casi en simultáneo a ese movimiento, la misma MasOrange se unió a Vodafone España para compartir su infraestructura. Es decir, que aquí ya se suman prácticamente tres redes. Pero la cosa no quedó acá. Acto seguido, Telefónica y Vodafone España –que en 2023 fue adquirida por Zegona, proceso que se completó en este 2024– también comenzaron a negociar la posibilidad de usar la misma infraestructura. Ya no son tres apoyadas sobre una misma red sino cuatro. ¿España avanza hacia una red única de fibra gestionada en su totalidad por el sector privado que invirtió en ellas?

El que más crece viene de abajo

Todo esto sin olvidar que Digi Mobil, la operadora que más está creciendo en estas latitudes, se apoya en la red de Telefónica, además de contar con infraestructura propia. En otras palabras, los acuerdos que han venido celebrando las operadoras en España están mostrando que es posible pensar en una única red sobre la cual todos los invitados pueden sumarse -por ahora es potestad de quienes han invertido fuerte en ellas- para focalizar el esfuerzo en los servicios e innovar desde ese lugar. La tecnología de red es la misma para todos y desde ahí parece no haber mucho más para hacer, más allá de ir a un esquema de Open RAN u optar por otra decisión tecnológica.

Imagen: Inactive/Unsplash

Lo que sucedió en España podría ser considerado como lo más extremo que ocurre en Europa en términos de compartición de infraestructura. Es, justamente, Telefónica la que viene liderando ese discurso desde hace años. En América latina es declamado casi como un mantra, aunque en la región la cuestión de la compartición de infraestructura avanza, aunque a otro ritmo.

Pero volvamos al Viejo Continente. En donde también hubo movimientos profundos fue en Italia. KKR se quedó, finalmente, con el negocio fijo de Telecom Italia, aunque el gobierno de ese país continúa teniendo el control de una operadora que considera estratégica. El objetivo en este caso es inyectarle el suficiente capital como para modernizar la infraestructura. Fue  lo que explicó, luego, el ingreso de un fondo canadiense a la Netco, que lo hizo con un 17,5 por ciento de participación

Debe recordarse, además, que un fondo británico se quedó con el 10 por ciento de la operadora italiana. En todos los casos, la inyección de dinero se fundamenta en la necesidad de desplegar una infraestructura robusta en la península.

Los cambios no se limitaron al sector público. Entre privados también hubo consolidaciones: Swisscom se quedó con Vodafone Italia por 8.000 millones de euros. Todo esto, sin dudas, dará lugar a un mercado renovado que podría traer las primeras novedades durante el 2025 que se inicia en breve.

Entre Open RAN y los movimientos de Iliad

Por el lado de Orange, además de estar presente en la mayoría de las demandas del sector en torno al fair share, y las implicancias de la inteligencia artificial, la operadora avanzó en un acuerdo con Vodafone para expandir un proyecto piloto de Open RAN en Rumania. Se trata de un proyecto en donde comienzan a sumarse actores con intención de tener un peso más relevante en ese segmento, tal como sucede con Samsung Networks. Sin dudas, la experiencia que se desarrolle aquí será una brújula para impulsar proyectos en el mismo sentido.

Imagen: Killer Biscuit/Flickr

Imagen: Killer Biscuit/Flickr

El otro jugador europeo a tener en cuenta en este cierre de 2024 para el sector en aquellas latitudes es Iliad. La compañía de origen francés se convirtió en el quinto operador europeo, detrás de Deutsche Telekom (DT), Orange, Telefónica y Vodafone.  La empresa sumó más de 50 millones de clientes y se hace cada vez más fuerte en Francia, Polonia a Italia. El desempeño de Iliad es relevante por cuanto durante el año amplió hasta el 40 por ciento su participación en Millicom, luego de haber efectuado un par de ofertas públicas por el control total que no prosperaron. Hecho que advierte el interés de sus accionistas por ampliar su pisada en América latina.

Así finaliza Europa su proceso de reconfiguración del sector. La compartición de infraestructura está siendo un caso testigo en España y los resultados que se vayan obteniendo de cara a una segunda mitad de década con énfasis en monetizar 5G seguramente inspiren a nuevos cambios.

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Andrea Catalano es la Editora en Jefe de TeleSemana.com. Andrea es periodista y licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Cuyo. Desde hace más de 20 años sigue al sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones y su impacto en la economía y la sociedad. A lo largo de su carrera se ha desempeñado en prensa escrita, on line, radio y televisión.

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