La locomotora regional, Brasil, sigue en el camino por garantizar que las escuelas del país cuenten con acceso a conectividad escolar de calidad. Por estas horas, fue la Entidad Administradora de Conectividad Escolar (EACE), quien anunció la apertura de un proceso de selección de proveedores para conectar a 13.000 instituciones del nivel primario y un presupuesto de 2.000 millones de reales (más de 365 millones de dólares).
Se trata del inicio de la fase 4, del proyecto conocido como Aprendiz Conectado, para el que se previeron recursos económicos y financieros en la subasta de espectro de la quinta generación móvil, concretada en noviembre de 2021. El plan debería haberse culminado en diciembre de 2025.
La fase 4, en modo activado
Los 365 millones de dólares, previstos por el Grupo de Seguimiento de Costos de Proyectos de Conectividad Escolar (Gape), posibilitará que los proveedores aprobados, instalen las redes externas de las escuelas, las WiFi y los sistemas fotovoltaicos de 13.000 escuelas porque además de llegar con Internet, el desafío involucra también al abastecimiento energético. En este caso, el llamado alcanza a todos los estados, con la excepción de Amapá, Distrito Federal, Roraima y Tocantins.
La convocatoria -disponible aquí– estará abierta hasta el 29 de septiembre, y está separa en temas y objetivos. Por ejemplo, en el caso de la red externa, se prevé que unas 10.422 escuelas cuenten, en un plazo de 24 meses, con una conexión de fibra óptica en funcionamiento (con todo lo que su despliegue involucre); a la par que se les sume una red interna de WiFi con el montaje, configuración y despliegue garantizado en cada espacio de cada institución.
En lo que al sistema fotovoltaico refiere, se trata de una solución completa energética autosustentable, que involucra desde los paneles solares, controladores de carga, luminaria y logística para 350 escuelas.
Imagen: Javier Quesada/Unsplash
En Brasil, la Estrategia Nacional de Escuelas Conectadas (Enec) fue anunciada hace un año, al calor de la que se articularon diversas estrategias ya vigentes. Entre ellas, las previstas en las obligaciones de hacer de la subasta de espectro para 5G en noviembre de 2021, detrás de la que se alinearon y organizaron los esfuerzos públicos. Hace un semestre, se iniciaron pruebas de 5G FWA para avanzar con el desarrollo de esta estrategia nacional y apenas dos meses que se planteó el desafío de promover la generación de talentos digitales.
La apuesta es regional
Pero no sólo ellos. En la región hay más iniciativas para fomentar y favorecer la conectividad escolar. En Colombia, por ejemplo, en el marco del plan para erigir al país como un hub digital y en el marco de la estrategia presentada como PotencIA Digital, el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) lanzó una licitación para garantizar la conectividad escolar, que luego se revocó y cuyo relanzamiento está en agenda.
En Ecuador también hay iniciativas, en este caso, financiadas con 45 millones de dólares provistos por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para que, en cuatro años, se reduzca la brecha digital escolar a través de la distribución de conectividad y de kits tecnológicos a 2.400 escuelas rurales.
En Chile, a su vez, sólo en 2023 se logró conectar a casi 10.000 establecimientos educativos, de los 13.000 existentes, y a sus casi tres millones de estudiantes en el marco del desarrollo del Plan Brecha Digital Cero.
Debe estar conectado para enviar un comentario.