El mercado de los proveedores de Internet de la Argentina se prepara para un futuro de fusiones y adquisiciones, tal como sucedió en Brasil hace cuatro años, y también para el ingreso de inversores interesados en tomar posición en el país, tal como ya lo hicieron en Chile y Colombia. Ya hay movimientos que anticipan lo que estaría por venir, aunque el uso del potencial no es caprichoso. Para que esta previsión realmente se concrete todavía quedan resolverse cuestiones desde el punto de vista macro y micro, en un país que hace muchos años perdió el liderazgo que supo tener en el mundo TIC.
Es la mirada que tienen algunos de los protagonistas que forman parte de los proveedores de Internet (ISPs) pequeños y medianos, y que se mueven con lógicas distintas a las que exhiben las grandes operadoras, como Telecom, Claro y Telefónica. En mayor o medida, las tres grandes prestadoras cuentan con espalda financiera para hacer frente a los cambios y a las crisis de la Argentina.
A los ISP pequeños hoy se les hace cuesta arriba mantener sus operaciones porque el ancho de banda ya no está subsidiado y los equipos para mantener las operaciones tienen otros costos. Esto es lo que están mirando los ISP medianos, entendidos como aquellos que tienen entre 40.000 y 50.000 clientes, y que están proponiendo esquemas de asociación para salir mejor parados en un contexto donde el bolsillo del argentino promedio no soporta más aumentos, y donde la manera de competir pasa por el precio y cada vez más por la calidad del servicio, entiéndase fibra óptica, que alcanza al 35 por ciento del total de conexiones.
En los últimos años, el mercado en general se volcó al despliegue de esta tecnología, que totaliza 3,9 millones sobre un total de 11,5 millones de accesos de banda ancha existentes a diciembre de 2023, según los datos del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom). Y si bien todo crecimiento es destacable, también es cierto que la penetración de esta tecnología en la Argentina es baja si se compara con los países de la región, como Chile, Uruguay y Brasil.
¿Por qué vendría un proceso de fusiones entre los ISP?
Por necesidad de volumen y de supervivencia. Y porque también hay procesos donde las historias se repiten. “Hay un montón de ISP chiquitos a los que no les da la cuenta. Algunos tienen problemas por no contar con los permisos adecuados para hacer las cosas que tienen que hacer y hasta hace un mes atrás un montón de pequeños IPS en venta porque la guerra entre las grandes operadoras los volteaba”, describió Ariel Graizer, presidente de la Cámara Argentina de Internet (Cabase).
“Creo que los fondos de inversión (con los que he hablado) todavía ven que la Argentina no hizo los pasos necesarios para que los de afuera vengan a comprar. Están quienes ya lo hicieron en el pasado y lo están haciendo de vuelta, porque saben que van a ser los primeros en vender el paquete grande. Es un proceso que hoy está vigente”, agregó el directivo.
El futuro proceso de fusiones que se espera para la Argentina responde a un comportamiento que siempre vuelve. “En el mundo, se dan cíclicamente procesos donde hay concentración de oferta y los más grandes absorben a los más chicos, o donde los borran del mercado. Si Claro y Telecom deciden pelearse una ciudad donde hay un tercero chiquito, pobre muchacho, no resiste la batalla de precios. Si (ese ISP chiquito) no quiere vender, terminan borrándolo”, dijo sin vueltas Patricio Seoane, director de Internet Services, uno de los protagonistas de los procesos de fusión que se vienen.
Para no quedar como jamón del medio, los ISPs encuentran en estos procesos de fusiones y/o asociatividad la manera de plantarse mejor ante la competencia que, eventualmente, puedan presentarles los grandes operadores de este país.
Seoane indicó que lo que se espera en la Argentina vendrá como parte de una política que se dejó atrás. “Acá la macro estaba controlada. En Chile, Brasil y Colombia los fondos desembarcaron en su momento, pero cuando vieron la macro en Argentina se fueron”, describió. Ahora ese interés parece estar renovado. Aunque no será a cualquier precio, ni tampoco de manera inmediata. En la mirada del director de Internet Services, ahora los inversores están esperando la aprobación de la llamada Ley Bases -que acaba a volver a Diputados luego que el Senado introdujera cambios en el primer proyecto aprobado- “y si en la elección de medio término le va bien (al actual gobierno), van a empezar a mirar a la Argentina más para el mediano plazo”.
Si se dan estas condiciones, los ISP medianos serán los que se muevan más rápidamente para ser atractivos para el exterior. Para ello, tendrán que avanzar sobre otros ISPs, porque tener 40.000 clientes puede ser un buen número, pero si se suman 20.000 clientes de otro ISP, y 30.000 de otro, se pasa a tener una base de 90.000 clientes que comienza a mostrar otro color. La forma es “crecer tomando más clientes o comprando carteras, entonces se dispara todo el proceso. Los medianos terminan tomando a los más chicos, hinchan el pecho, se ponen lindos y cuando vienen los fondos advierten que ya no es tan chico”, describió.
Estos tres o cuatro ISPs pequeños que se juntan -por compra, por asociación- pueden tener alcance en distintos lugares y, aún así, vender en conjunto porque lo que importa en países vastos como la Argentina es tener buena cobertura geográfica.
Esta especie de concurso de belleza telco no es para todos los ISPs pequeños. Aquellos que no tienen los permisos correspondientes, o instalaron con equipos que difícilmente puedan integrarse en una nueva red, o tienen problemas con la Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP), difícilmente pasen el primer filtro.
“Esa asociatividad requiere más profesionalización de los ISP, que cuesta mucho entre aquellos que son muy precarios. Queremos a los que han hecho las cosas bien. Y que no pudieron crecer porque no tuvieron espalda, o visión, o márketing, que es lo que les aportamos para crecer en el negocio”, agregó Seoane.
Se estima que hay unos tres o cuatro ISPs medianos en la industria que están en condiciones de crecer mediante este tipo de procedimientos. En el caso de Internet Services, ya tiene negociaciones avanzadas con, al menos, cinco proveedores más pequeños. Una vez concretadas las auditorías, due dillenges, transferencia de fondos de comercio, edictos y demás regulaciones involucradas se dará a conocer el acuerdo. Como parte de la estrategia, Internet Services tomará el management general de los ISPs absorbidos, que pasarán a llamarse Ilamarse Internet Services y a beneficiarse de formar parte de una operadora más grande en cuanto a compra de equipamiento, estrategia de márketing y comercial. “Pero el management local queda integrado porque el know how local es lo que aporta ese ISP”, aclaró el directivo.
La expectativa es que esos ISPs que hoy tienen 30.000 o 40.000 clientes y que fueron absorbidos también crezcan en cantidad de accesos. Seoane estima que varios de ellos tienen la potencialidad de llegar a duplicar esas bases de suscriptores. “Hay algo que ocurre y es que cuando compramos a alguien chiquito, si dan un buen servicio también crece. Y nos animamos a proyectar que en tres, cuatro, cinco años estarán el doble de clientes”, aseveró.
Este proceso que está comenzando a producir los primeros movimientos en la Argentina, ya se dio en países como Brasil, como se mencionó al principio del artículo. En 2021, los sectores de tecnología de la información y de telecomunicaciones y medios encabezaron las fusiones, que fueron récord en ese año entre las distintas actividades económicas relevadas. En la actualidad, este país asiste a una segunda ola de consolidación entre los proveedores de Internet medianos y pequeños, responsables del 56 por ciento de la conectividad de banda ancha de ese país, tal como lo aseguró Basilio Pérez, presidente de LAC ISP en la última edición del Internet Day realizado en Buenos Aires.
Aún en medio de una segunda ola, Brasil cuenta con 20.000 pequeños prestadores de Internet, aunque ahora son más robustos y están mejor parados en el mercado. De hecho, algunos de ellos cotizan en bolsa. ¿Será posible pensar en un futuro de estas características para los ISPs de la Argentina? Un futuro que, como lo que sucedió en Brasil, se tradujo en más inversiones y en mejor conectividad para la población.
La rueda en la Argentina quiere comenzar a moverse, pero todavía hay que esperar para ver lo que sucede a nivel de la macro y la micro, los factores que inclinan la balanza por un sí o por un no.
