La filial argentina de América Móvil, Claro, denunció a su competidor Movistar por supuestas maniobras anticompetitivas. Lo acusó ante el Ente Nacional de Telecomunicaciones (Enacom) y el Ministerio de Desarrollo Productivo por obstaculizar el traspaso de líneas propias a terceros, situación que es derecho de los usuarios móviles del país. Realizó tres presentaciones formales.
Las actas están firmadas por el apoderado de la compañía, Juan Pablo Tognetti. Considera que hasta el 20 de mayo pasado el operador rechazó 27.272 traspasos y en el 79,3 por ciento de los casos incluyó como argumento la existencia de deudas pendientes de pago. Entre los clientes por migrar, sostuvo el denunciante, figuran líneas que pertenecen al hospital Posadas.
Claro solicitó al regulador que interfiera en la situación porque “hasta el presente no se limitó la portabilidad numérica por mora”, indicó la agencia Télam. La compañía entiende que el decreto 311/20, que dispone la emergencia sanitaria, genera un nuevo marco jurídico y no permite suspender o interrumpir el servicio, tampoco impedir o limitar el derecho de portarse del cliente que incumple con el pago.
Desde Movistar sostuvieron que la empresa “cumple con el reglamento de portabilidad dispuesto por las autoridades, que establece que cualquier cliente puede portar libremente hacia otras compañía habiendo saldado cualquier deuda existente, o bien habiendo acordado previamente un plan de pago”. Sobre la demanda, aseguraron que al momento no fueron notificados.
Según los últimos datos disponibles, hasta febrero de este año se aplicó portabilidad numérica en 11,4 millones de casos en Argentina. El 63 por ciento de las líneas se mantuvo en el prestador al que migró y el resto volvió a cambiar al menos una vez. Desde 2012 a la fecha el 14 por ciento de los traspasos fue rechazado y más de la mitad de ellos responde a cuestiones asociadas con el operador que el cliente quería abandonar.
El cambio de operador manteniendo el número es un derecho adquirido para los usuarios de la mayoría de los países de la región, con excepciones como Uruguay. Ya se registran casos de denuncias entre compañías por este tema. En Chile, por ejemplo, Wom acusó a Entel de ofrecer un descuento de 50 por ciento por seis meses a usuarios que migren desde esa compañía, mientras que para otros era del 10 por ciento. La situación también se elevó a tribunales locales para revisión de posible práctica anticompetitiva.